Emiratos Árabes Unidos (EAU) ha anunciado la construcción de la primera central nuclear del mundo árabe para 2017. El proyecto, que llevaba varios años en discusión, se concretó el pasado domingo cuando el presidente de esa federación, el jeque Jalifa Bin Zayed al Nahayán, firmó la ley marco para su programa atómico, según la prensa local. De momento, el tercer productor mundial de petróleo ha asignado 40.000 millones de dólares al desarrollo de "un sector nuclear pacífico".
"Los planes están en marcha para que el primer reactor esté operativo en 2017", anunció Hamad al Kaabi, el representante emiratí ante la OIEA, citado por el diario Khaleej Times. EAU estima que su demanda interna de electricidad va a aumentar de los 15.000 megavatios de 2008 a 40.000 en 2020, debido al crecimiento económico y de población. Cubrir esa diferencia con hidrocarburos le obligaría a reducir las exportaciones de éstos que proporcionan el 80% de los ingresos del Estado.
Sin duda inspirados por Irán, los seis miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (Arabia Saudí, EAU, Kuwait, Qatar, Bahrein y Omán) llevan algún tiempo mostrando interés en la energía nuclear para hacer frente a la creciente demanda de electricidad y poder así disponer de más gas y petróleo para la exportación. Abu Dhabi planea construir tres o cuatro reactores en la primera etapa, que se iniciarán una por una con intervalos de 18 meses, en función de las necesidades eléctricas.
No enriquecerá uranio
Pero a diferencia de su vecino de la otra orilla del golfo Pérsico, EAU se ha comprometido a comprar el combustible nuclear necesario para sus reactores, de forma que no tenga que enriquecer uranio. Según la agencia de noticias emiratí WAM, la ley firmada por el jeque Jalifa prohíbe el enriquecimiento de uranio y el reprocesamiento del combustible utilizado.
Ese compromiso le granjeó el pasado mayo una promesa de cooperación del presidente estadounidense, Barack Obama. El Congreso tiene hasta el 17 de octubre para enmendar o rechazar ese acuerdo. Si como es probable no lo hace, el pacto, que Washington quiere promover como modelo para Irán, permitirá a EE UU transferir tecnología nuclear civil a EAU durante los próximos 30 años.
De momento, la construcción de la primera central ya ha suscitado el interés varios consorcios internacionales. Aunque Al Kaabi evitó hablar de fechas, varios medios estiman que el contrato podría otorgarse a mediados de este mes.